9/3-TU AUSENCIA

Esta soledad acompaña
día a día al silencio
que se vuelve insoportable
al tomar razón de tu partida.
.
Tengo la boca llena
de palabras contenidas
deseo gritar, para que me escuches
y con el eco tu voz llegue a mí
transformando en sueños de esperanzas
esta realidad que lastima.

Quiero sentir en mi cuerpo
la presión de tus manos,
imaginar que me abrazas,
el roce de tus mejillas en las mías…
creer que desde un lugar cercano
nos escuchas, estás aquí…

Abrir los ojos y ver dibujada tu figura,
oír que me llamas, que exclamas ¡ papá!
sentir mis manos libres
para atarte a mí infinitamente.
poder decirte y que me escuches
¡cuanto te extraño, como te amo...!

Papá